martes, 8 de diciembre de 2009

De Martha Pardiño a Jorge Gaston

De todos es conocido, el trabajo, la preocupación, el tiempo y el amor que Jorge Gastón le ha dedicado al grupo de COLABORADORES DE PRENSA, fundado por él hace casi cuatro años, en un salón del Colegio Belén de Miami

En ese tiempo se comprometieron con Jorge a fundar el grupo, el Padre Eduardo Barrios, S.J., el periodista peruano José Andréu, y la Dra. Maritza Beato, ya fallecida.



Por medio de las cartas y los escritos publicados, muchas personas, como una servidora, hicimos contacto con este grupo y fuimos invitados a ser miembros del mismo. A todos nos unía esa semillita que, estoy segura, que llevamos dentro los miembros de la CDP, de querer escribir y ser la voz de aquellos hermanos que quieren dejar oír sus quejas, sus comentarios, sus escritos, pero que no lo pueden hacer por miles de razones.



Le mandé a Jorge mi resumé, fui aceptada, y comenzamos a reunirnos en el restaurante La Carreta de la Calle 8. Me acuerdo de las primeras reuniones y de los primeros invitados que nos hicieron el honor de su presencia y sus consejos. Jorge se ocupaba de ponerse en contacto con los invitados y de avisar a todos los del grupo del día y la hora. Fueron muchos los que nos honraron con su presencia en aquellos primeros pininos del grupo. Tengo un recuerdo muy agradable de Mercedes Soler, Andrés Reynaldo, el comisionado Javier Souto, y otros que compartieron aquellas tardes inolvidables. Era en ese entonces el coordinador Jorge, el vice-coordinador José Andréu, la secretaria Alicia Bencomo, q.e.p.d., y los miembros que nunca fallaron entre los que se encontraban Víctor Caamaño, Enrique Pérez Blanco, José Alberto Vargas, Fernando y Elsa Rodríguez, José M. Izquierdo, Julio Rivadulla y Alberto y yo. Al retirarse Alicia del grupo para dedicarse de lleno a la causa de la libertad de Cuba, recayó en mí la posición de secretaria.

Cuando Jorge consiguió que nos dejaran ocupar una vez al mes el salón de conferencias del restaurante Picadilly, vimos los cielos abiertos: un salón para nosotros solos, un micrófono, sillas y mesas. Lo único que nos pedía el restaurante era que se consumieran las comidas y las bebidas del mismo. Se incrementaron los miembros y tuvimos invitados de alto calibre: comisionados, periodistas, presidentes de organizaciones, abogados, historiadores, etc., etc. Fue entonces que se hicieron elecciones y salí yo de coordinadora, Vargas de vice, Darío de Tesorero y Víctor de Cultura.



Entonces entró Magaly Aguilera en el grupo – entre nosotros, una de las mejores cosas que nos ha sucedido – porque trajo ideas nuevas y energía a un grupo que estaba teniendo algunos baches de comunicación. Magaly amablemente cedió su casa para las reuniones mensuales y hemos sido bendecidos con una cantidad de miembros nuevos asombrosa. Las reuniones en casa de Magaly son entretenidas, culturales, donde podemos comentar de todo pues todos estamos abiertos a sugerencias y nuevas inquietudes.



No hubiéramos podido llegar a ser un grupo tan comprometido y unido sino fuera por el esfuerzo y el amor que Jorge Gastón le ha imprimido al grupo.



GRACIAS, JORGE, PORQUE ERES UNA INSPIRACION PARA TODOS

!QUE DIOS TE BENDIGA!



Martha Pardiño, Coordinadora

CDP

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