Millones dan hasta la vida por vivir en los Estados Unidos de América. País faro que alumbra hacia un destino pletórico de felicidad, abundancia y sobretodo de protección a los derechos civiles y humanos de todos sus habitantes, ya sean ciudadanos, residentes o en vías de serlo.
Sin embargo, después que llegamos, nos situamos y comenzamos a ser parte de la vida diaria de este maravilloso pais, que sin lugar a dudas ofrece oportunidades como ninguno otro en el mundo y nos damos cuenta que al igual que el sol, con toda su brillantez, también tiene sus manchas, manchas que muchos no esperábamos que existieran, al menos algunas con tanta intensidad.
Sabemos que la perfección absoluta no existe y menos en la dirección política, económica, social, y administrativa de un pais.
Como disfrutamos de un pluralismo político y partidista, a veces pensamos que los problemas que padecemos es una cuestión transcisional, dependiendo del partido que esté en el poder. Ya sea el conservador republicano o el liberal demócrata, los independientes cuentan solo para inclinar balanzas en un momento dado.
Pero no es así. En medio de nuestro diario esfuerzo por sobrevivir, siendo fieles cumplidores de las leyes, pagando los sagrados impuestos y luchando por hacer de nuestros hijos hombres y mujeres de bien, pasan cosas que nos hacen la vida un yogurt (expresión muy cubana que equivale a tragedia) tanto cuando tenemos a un Carter o un Johnson como cuando tenemos a un Nixon, a un Bush o un Obama.
Entrando en materia: ¿quién nos protege cuando vemos los precios del combustible y la canasta alimenticia diaria en una loca escalada alcista e imparable; los seguros de salud, de las casas, de los autos; los alquileres de las viviendas y en los cada vez mas costosos estudios universitarios?
Mientras, los ingresos permanecen estáticos y tenemos que hacer filigranas para poder atar cabos y cumplir con nuestras obligaciones, mas aún en situaciones de grave crisis económica como la actual, provocada por la avaricia de muchos y la poca preocupación de algunos gobiernos por regularlos.
Nuestro sistema económico establecido por un grupo de sabios y hombres de bien, diseñaron, con todo amor y sapiencia, una constitucion como no hay otra en el mundo, que rigiera nuestras vidas estableciendo el libre comportamiento de los precios de acuerdo con un mercado regido por la sagrada e inmutable ley capitalista de la oferta y la demanda; cuando hay demanda los precios suben y a la inversa cuando no la hay, así de simple. Pero eso, que se dice fácl, lleva implícito repercusiones terribles, provocando despidos masivos, cierres de centros laborales y creando un caos en la población. Muchos dirán, bueno, ese es el capitalismo...
A estas alturas, y después de tantos golpes, estamos convencidos de que por muy práctico y correcto que parezca, eso no funciona, al menos para el ciudadano de a pie, el retirado, jubilado, el de esa clase media, otrora motor impulsor de la economía en nuestro país, hoy casi en extinción.... Estamos llegando a la triste situación de ser solo ricos o pobres, así de simple.
A nadie se le ocurrió pensar que parejamente con ese supuesto inteligente sistema, que con el tiempo se ha tornado beneficiando sólo a los ricos y poderosos, debieron crear algún tipo de protección al esforzado y honesto trabajador víctima de esas locas fluctuaciones del mercado que muchas veces han acabado creando crisis inflacionarias de las que el rico siempre ha salido más rico y el pobre más pobre.
Por una parte, el salario mínimo de $7.25 la hora recientemente implantado, cubre escasamente los gastos mínimos de los trabajadores. Para los retirados, después de una vida de luchas y sacrificios lo único que tienen para cubrir sus gastos es un escuálido retiro, que aumenta sólo en un dos o tres por ciento cada año y que ahora, producto de la actual crisis se anuncia que será eliminado por los próximos dos o tres años.
La parte del Medicare sube sin fallar todos los años.
El Medicaid ha suspendido a sus beneficiarios desde hace varios años el pago por las medicinas, pasándolos al Medicare quien ha creado planes de ayuda pero todos con co-pagos, algunos verdaderamente abusivos.
Además de los más de 45 millones de personas sin seguros de salud que actualmente existen en el país.
Tenemos agencias y organismos oficiales que supuestamente protegen al consumidor pero todo queda en una cuestión de retórica y burocracia que los ejércitos de cabilderos de las megas empresas se encargan de neutralizar de una manera bochornosa, como se ha comprobado ultimamente en Tallahhassee.
Y no solo a nivel estatal asoma la irresponsabilidad. Aqui lo tenemos cuando vemos que un administrador de una alcaldia, supuestamente fuerte, se ha convertido en el que verdaderamente dirige, manda y ordena los dineros y destinos de nuestra comunidad.
Los comisionados por su parte se han visto prácticamente atados de pies y manos al momento de pretender ejercer sus funciones. Anteriormente las funciones del administrador condal estaban supeditadas al escrutinio y decisiones de los comisionados,
hoy en dia eso se ha invertido.
En la última y decisiva reunión del jueves 17 de este mes se demostró, cuando los comisionados fueron citados uno a uno y por separado a una reunión exclusiva en un salón aparte, sin público ni periodistas, por el administrador George Burguess para decidir la aprobación o no de muchos temas que inclusive habian sido analizados, votados y aprobados horas antes por la totalidad de los comisionados.
El resultado final es que todavía han quedado cuestiones por definir de las que se supone habrian de sanear el déficit de 445 millones de la administración del condado.
Y todo eso ocurre, a partir de la elección de un alcalde condal totalmente incapacitado teniendo necesariamente que poner en manos de su administrador las funciones de su oficina.
El papel de los comisionados ha quedado muy por debajo de las expectativas de todos los ciudadanos que con nuestros votos les dimos la autoridad para dirigir los destinos de nuestra communidad.
Para los que queremos y creemos en este gran país y sus leyes, todo esto es decepcionante.
Habrá que tenerlo en cuenta en las próximas elecciones...nuestra voz son los votos, Tenemos que ser mas cuidadosos a la hora de elegir a quienes habrán de defender nuestros derechos e intereses..
El alcalde. hombre honesto y buen policía, resultó ser un fracaso total y de contra lo hicimos "fuerte".
Los comisionados, a todos los niveles, tanto de las ciudades como del condado, tendrán que ser más analizados y antes de hacer el ciculito en las boletas al lado de sus nombres, hacernos preguntas como: ¿tiene la capacitación necesaria para el cargo, los conocimientos económicos suficientes para entender bien lo que es un presupuesto y poder manejar millones de dolares, tiene la honestidad probada y el profesionalismo -no el carisma- que el cargo requiere?
La población, en las urnas, es la que decide. Seamos menos apáticos a la hora de votar y mas responsables...vayamos a ejercer el sagrado derecho del voto y hagámoslo con cuidado, recordemos que esos hombres y mujeres que elijamos serán los responsables de dirigir nuestros destinos.
Jorge Gaston
Sin embargo, después que llegamos, nos situamos y comenzamos a ser parte de la vida diaria de este maravilloso pais, que sin lugar a dudas ofrece oportunidades como ninguno otro en el mundo y nos damos cuenta que al igual que el sol, con toda su brillantez, también tiene sus manchas, manchas que muchos no esperábamos que existieran, al menos algunas con tanta intensidad.
Sabemos que la perfección absoluta no existe y menos en la dirección política, económica, social, y administrativa de un pais.
Como disfrutamos de un pluralismo político y partidista, a veces pensamos que los problemas que padecemos es una cuestión transcisional, dependiendo del partido que esté en el poder. Ya sea el conservador republicano o el liberal demócrata, los independientes cuentan solo para inclinar balanzas en un momento dado.
Pero no es así. En medio de nuestro diario esfuerzo por sobrevivir, siendo fieles cumplidores de las leyes, pagando los sagrados impuestos y luchando por hacer de nuestros hijos hombres y mujeres de bien, pasan cosas que nos hacen la vida un yogurt (expresión muy cubana que equivale a tragedia) tanto cuando tenemos a un Carter o un Johnson como cuando tenemos a un Nixon, a un Bush o un Obama.
Entrando en materia: ¿quién nos protege cuando vemos los precios del combustible y la canasta alimenticia diaria en una loca escalada alcista e imparable; los seguros de salud, de las casas, de los autos; los alquileres de las viviendas y en los cada vez mas costosos estudios universitarios?
Mientras, los ingresos permanecen estáticos y tenemos que hacer filigranas para poder atar cabos y cumplir con nuestras obligaciones, mas aún en situaciones de grave crisis económica como la actual, provocada por la avaricia de muchos y la poca preocupación de algunos gobiernos por regularlos.
Nuestro sistema económico establecido por un grupo de sabios y hombres de bien, diseñaron, con todo amor y sapiencia, una constitucion como no hay otra en el mundo, que rigiera nuestras vidas estableciendo el libre comportamiento de los precios de acuerdo con un mercado regido por la sagrada e inmutable ley capitalista de la oferta y la demanda; cuando hay demanda los precios suben y a la inversa cuando no la hay, así de simple. Pero eso, que se dice fácl, lleva implícito repercusiones terribles, provocando despidos masivos, cierres de centros laborales y creando un caos en la población. Muchos dirán, bueno, ese es el capitalismo...
A estas alturas, y después de tantos golpes, estamos convencidos de que por muy práctico y correcto que parezca, eso no funciona, al menos para el ciudadano de a pie, el retirado, jubilado, el de esa clase media, otrora motor impulsor de la economía en nuestro país, hoy casi en extinción.... Estamos llegando a la triste situación de ser solo ricos o pobres, así de simple.
A nadie se le ocurrió pensar que parejamente con ese supuesto inteligente sistema, que con el tiempo se ha tornado beneficiando sólo a los ricos y poderosos, debieron crear algún tipo de protección al esforzado y honesto trabajador víctima de esas locas fluctuaciones del mercado que muchas veces han acabado creando crisis inflacionarias de las que el rico siempre ha salido más rico y el pobre más pobre.
Por una parte, el salario mínimo de $7.25 la hora recientemente implantado, cubre escasamente los gastos mínimos de los trabajadores. Para los retirados, después de una vida de luchas y sacrificios lo único que tienen para cubrir sus gastos es un escuálido retiro, que aumenta sólo en un dos o tres por ciento cada año y que ahora, producto de la actual crisis se anuncia que será eliminado por los próximos dos o tres años.
La parte del Medicare sube sin fallar todos los años.
El Medicaid ha suspendido a sus beneficiarios desde hace varios años el pago por las medicinas, pasándolos al Medicare quien ha creado planes de ayuda pero todos con co-pagos, algunos verdaderamente abusivos.
Además de los más de 45 millones de personas sin seguros de salud que actualmente existen en el país.
Tenemos agencias y organismos oficiales que supuestamente protegen al consumidor pero todo queda en una cuestión de retórica y burocracia que los ejércitos de cabilderos de las megas empresas se encargan de neutralizar de una manera bochornosa, como se ha comprobado ultimamente en Tallahhassee.
Y no solo a nivel estatal asoma la irresponsabilidad. Aqui lo tenemos cuando vemos que un administrador de una alcaldia, supuestamente fuerte, se ha convertido en el que verdaderamente dirige, manda y ordena los dineros y destinos de nuestra comunidad.
Los comisionados por su parte se han visto prácticamente atados de pies y manos al momento de pretender ejercer sus funciones. Anteriormente las funciones del administrador condal estaban supeditadas al escrutinio y decisiones de los comisionados,
hoy en dia eso se ha invertido.
En la última y decisiva reunión del jueves 17 de este mes se demostró, cuando los comisionados fueron citados uno a uno y por separado a una reunión exclusiva en un salón aparte, sin público ni periodistas, por el administrador George Burguess para decidir la aprobación o no de muchos temas que inclusive habian sido analizados, votados y aprobados horas antes por la totalidad de los comisionados.
El resultado final es que todavía han quedado cuestiones por definir de las que se supone habrian de sanear el déficit de 445 millones de la administración del condado.
Y todo eso ocurre, a partir de la elección de un alcalde condal totalmente incapacitado teniendo necesariamente que poner en manos de su administrador las funciones de su oficina.
El papel de los comisionados ha quedado muy por debajo de las expectativas de todos los ciudadanos que con nuestros votos les dimos la autoridad para dirigir los destinos de nuestra communidad.
Para los que queremos y creemos en este gran país y sus leyes, todo esto es decepcionante.
Habrá que tenerlo en cuenta en las próximas elecciones...nuestra voz son los votos, Tenemos que ser mas cuidadosos a la hora de elegir a quienes habrán de defender nuestros derechos e intereses..
El alcalde. hombre honesto y buen policía, resultó ser un fracaso total y de contra lo hicimos "fuerte".
Los comisionados, a todos los niveles, tanto de las ciudades como del condado, tendrán que ser más analizados y antes de hacer el ciculito en las boletas al lado de sus nombres, hacernos preguntas como: ¿tiene la capacitación necesaria para el cargo, los conocimientos económicos suficientes para entender bien lo que es un presupuesto y poder manejar millones de dolares, tiene la honestidad probada y el profesionalismo -no el carisma- que el cargo requiere?
La población, en las urnas, es la que decide. Seamos menos apáticos a la hora de votar y mas responsables...vayamos a ejercer el sagrado derecho del voto y hagámoslo con cuidado, recordemos que esos hombres y mujeres que elijamos serán los responsables de dirigir nuestros destinos.
Jorge Gaston
Jorge, pienso que la solución está en postular a nuestros representantes y no en elegir dentro de los que se postulan a sí mismos.
ResponderEliminarVictor, gracias por el comentario///te digo que si el pueblo no se pone para las cosas...todo seguira igual...se reeligen pues no hay caras nuevas...hay que movilizar las conciencias...que se tornen mas activas..
ResponderEliminarJorge
El problema no es de ellos, es nuestro porque no protestamos. Este es un país, y yo vivo aquí hace más de cuarenta años,por eso lo digo, en que el ciudadano tomaba acción, fuera por el alto costo de los productos o por el politico que no hacia su trabajo correctamente.
ResponderEliminarMe acuerdo en la época de la marginación negra, como ellos salian a las calles, hasta que obtuvieron una serie de prestaciones inverosimiles, que son parte de los costos excesivos que hoy tienen el condado.
Recuerdo las filas en las avenidas de los americanos blancos protestando porque aumentaron los precios del tomate....la protesta era lo que generaba miedo en el gobernante que se sabian vigilados, sabian que tenian que respetar al votante,porque este se lo iba a hacer pagar en las próximas elecciones.
Ahora no. Si somos republicanos votamos republicanos aunque nos maltraten y nos sentimos agradecidos por una sonrisa de cualquier politico que no nos cumple sus promesas.
Nos vendieron la idea de que el latino, si era cubano mejor, debia estar en los grandes puestos de poder y ahí vamos a darle nuestro voto aunque sepamos que no hacen nada por nuestros intereses.
Nos sentimos tan agradecidos de vivir aquí que ignoramos nuestros derechos, por eso Miami ha sostenido la economia del estado de la Florida y nosotros nos hemos dejado robar sin una protesta, hemos hecho las carreteras del norte con nuestros impuestos y nos hemos quedado callados aún sabiendo que nosotros necesitamos con urgencia resolver el transporte.
Necesitamos tener cociencia de nuestros derechos y para eso nos hace falta educarnos politicamente para saber reconocerlos.
Magaly
Gracias Magaly por comentario tan sabio y extenso...hablas con propiedad...lo has vivido...hay que seguir luchando...machacando...el pueblo en este pais tiene un poder enorme y no lo sabe o quiere usar...
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